Lecciones aprendidas de la ciberguerra en Ucrania

XVI Jornadas STIC CCN-CERT
Redacción

En el marco de la celebración de las XVI Jornadas STIC CCN-CERT y IV Jornadas de Ciberdefensa ESPDEF-CERT, ha tenido lugar una ponencia sobre la ciberguerra en Ucrania y las lecciones que nos ha dejado este tipo de combate. La presentación ha sido impartida por Francisco Javier Roca, comandante del Mando Conjunto del Ciberespacio (MCCE). Durante su intervención, Roca ha ido detallando cómo la ciberguerra planteada por Ucrania ha conseguido minimizar los ciberataques rusos durante los últimos meses.

En realidad, todo empezó en 2014, con la invasión rusa de Crimea. Desde ese momento, las autoridades ucranianas comenzaron a prepararse digitalmente para nuevos ciberataques rusos, porque sabían que tarde o temprano llegarían. De hecho, «la transformación digital, la ciberseguridad y la gestión de datos» han sido los tres ejes fundamentales en los que Ucrania se apoyó para preparar su respuesta a la ciberguerra rusa, según explicó Roca. Es más, Mykhailo Fedorov, viceprimer ministro de Ucrania y ministro de Transformación Digital desde el año 2019, ha sido el gran artífice de todo ello. «Se comprometió a convertir a Ucrania en una potencia digital y en ello ha estado trabajando durante los últimos años».

A partir de aquí, el comandante del MCCE enumeró las lecciones aprendidas de la ciberguerra en Ucrania, detallando algunas medidas del Gobierno ucraniano.

Libertad de comunicaciones en la ciberguerra en Ucrania

Asegurar la libertad de acción en el ciberespacio es fundamental para poder contrarrestar una ciberguerra. En este sentido, Ucrania actuó en varios frentes. En primer lugar, en colaboración con las compañías de telecomunicaciones, aseguraron la red móvil para que los ciudadanos pudieran seguir comunicándose. «Paralelamente, quitaron el roaming de Rusia para que los soldados rusos no pudieran comunicarse en territorio ucraniano. Asimismo, activaron el roaming de emergencia para que cualquier persona tuviera cobertura con cualquier compañía», comentó.

Sin ciberespacio no hay respuesta

La ciberguerra en Ucrania también ha demostrado que «sin el acceso seguro y garantizado al ciberespacio ningún país podría responder adecuadamente a una amenaza híbrida o incluso convencional», explicó Roca. El país consiguió mantener cerca del 80% de la disponibilidad de Internet mientras había electricidad. Además, contó con el apoyo de la corporación Starlink y sus más de 2000 satélites que proporcionaban conexión a Internet en cualquier lugar del país.

Resiliencia, protección y defensa

Asimismo, resulta fundamental fortalecer la resiliencia, la protección y la defensa de las redes, los servicios esenciales y las infraestructuras críticas. El hecho de estar preparándose durante ocho años y el haber sufrido ciberataques constantes a lo largo de este tiempo ha permitido al país saber defenderse en este sentido. «La magnitud de los ciberataques que ha sufrido Ucrania hubiera tumbado a nueve de cada diez países, con una media de más de un ciberataque de importancia al día», afirmó Roca.

Sistema integral y conjunto

Otra lección aprendida de la ciberguerra de Ucrania es que las Fuerzas Armadas se deben dotar de una sistema integral y conjunto que permita realizar de una forma coordinada acciones defensivas, de inteligencia y ofensivas en el cibersepacio coordinándolas con el resto de operaciones cinéticas. En el caso de Ucrania, contaron con una gran coordinación interna, ayuda de los ciudadanos y también cooperación externa con apoyo de otros países y de las cibermilicias. «Es lo que Fedorov llama IT army, al que se apuntaron más de 300.000 cibercombatientes de todo el mundo», puntualizó el comandante.

Tecnología civil en la ciberguerra en Ucrania

Asimismo, es fundamental el uso de la tecnología civil en refuerzo o respaldo de las capacidades militares, especialmente el empleo de la Inteligencia Artificial. En este sentido, Ucrania ha convertido a los dispositivos móviles en las armas de los civiles. Pusieron a su disposición un sinfín de aplicaciones que permitían usar el móvil como walkie-talkie, enviar alertas cuando se detectaban unidades enemigas, utilizar el reconocimiento de caras para identificar a las tropas enemigas, geolocalizarse sin conexión a Internet, etc. Además, reforzaron su tecnología de Inteligencia Artificial para interceptar comunicaciones rusas y que pudieran traducirse, hacer un resumen y enviarse a las tropas de forma automática para su información.

Grandes tecnológicas

Y en todo ello Ucrania contó con el apoyo de las grandes empresas tecnológicas (Google, Apple, Meta, Microsoft y Amazon – GAMMA). “Solo ellas representan la tercera economía del mundo, tras EEUU y China. Su misión es trabajar por el bien de la humanidad. Por eso, desde un primer momento dieron su apoyo a Ucrania luchando en el ciberespacio”, afirmó Roca.

En resumen, la ciberguerra en Ucrania es el comienzo de una nueva forma de combatir en la que el enfrentamiento cara a cara se hace con una pantalla de ordenador delante. Y es que, tal y como finalizó su intervención Roca, “quien domine el ciberespacio dominará la contienda”.

Las diez ventajas de dominar el ciberespacio
  • Cohesionar y mantener unidad a la población.
  • Posibilitar y potenciar las capacidades de las Fuerzas Armadas.
  • Permitir al Ministerio de Interior mantener la seguridad y el orden público.
  • Que el Gobierno y las autoridades puedan ejercer su liderazgo.
  • Obtener la solidaridad internacional solicitando la ayuda necesaria.
  • Obtener una mejor conciencia situacional sobre el terreno.
  • Combatir la propaganda y la desinformación.
  • Coordinar las acciones de resistencia y defensa de la población.
  • Mantener los servicios esenciales y de emergencia.
  • Salvaguardar la soberanía digital.