La vulnerabilidad del ciberespacio, entre los principales riesgos para la Seguridad Nacional

Estafas por Internet, cibercriminales, ciberataques
Redacción

El Departamento de Seguridad Nacional ha publicado el Informe Anual de Seguridad Nacional 2021. Por tercer año consecutivo,  el Consejo de Seguridad Nacional recoge en ese documento el apartado ‘Análisis de Riesgos’. En él se exponen los resultados de la encuesta realizada en los meses de septiembre y octubre de 2021 a 192 personas sobre percepción de riesgos para la Seguridad Nacional.

En la primera parte de la encuesta se preguntaba a los expertos por 16 riesgos y amenazas y su nivel de probabilidad e impacto. Como resultado, la vulnerabilidad del ciberespacio se sitúa en segundo lugar, en cuanto a intensidad de riesgo, detrás de pandemias y epidemias y seguido por la vulnerabilidad energética.

Vulnerabilidad del ciberespacio

En segundo lugar, se atendía a la percepción de estos 16 riesgos y amenazas con una estimación de cinco años. Los resultados sitúan a cinco elementos en el rango de los riesgos y las amenazas que muestran un mayor deterioro. Estos elementos son:

  • La vulnerabilidad del ciberespacio.
  • Las campañas de desinformación.
  • Los efectos del cambio climático y de la degradación del medio natural.
  • Los flujos migratorios irregulares.
  • La vulnerabilidad energética.

Dentro del bloque de riesgos y amenazas con tendencia a empeorar se encuentran:

  • La inestabilidad económica y financiera.
  • La tensión estratégica y regional.
  • El espionaje y las injerencias desde el exterior.
  • Las emergencias y catástrofes.
  • Las amenazas a las infraestructuras críticas.
  • Las epidemias y pandemias.
  • La vulnerabilidad aeroespacial.

Cabe destacar que ninguno de los riesgos y amenazas para la Seguridad Nacional se encuentra dentro del rango de elementos con tendencia a mejorar o a mejorar mucho.

La última parte de la encuesta presenta el análisis de escenarios que se darán dentro de diez años. De ellos, la tecnología es el sector que se lleva la peor parte. De hecho, es señalada por los expertos como la que evolucionará de forma más pesimista.