¿Sabes qué es el ‘hackstorsion’? La Policía Nacional desmonta una red de estos ciberdelincuentes

Redacción

La Policía Nacional ha desarticulado una banda criminal que practicaba el ‘hackstorsion‘. Este novedoso tipo de ciberdelito se perpetra mediante anuncios divulgados en portales web y en foros de internet. También recibe el nombre de ciberextorsión y es frecuente verlo escrito con la grafía ‘hacktorsion’. La operación ha formado parte de un procedimiento gestionado por la Unidad Central de Ciberdelincuencia.

Los servicios que ofrecen estos ciberdelincuentes son de modificación de datos personales en los archivos de organismos oficiales y entidades privadas. Estos falsos hackers se presentan como capaces de eliminar multas de tráfico de la DGT, suprimir deudas pendientes con la Agencia Tributaria, datos de morosos de la ASNEF y alterar los expedientes académicos universitarios, mejorando las notas y creando titulaciones oficiales de cursos no estudiados. Otra actividad de la que se anuncian capaces es la de espiar perfiles de redes sociales, correos electrónicos o cuentas de WhatsApp. Tras lograr atraer a las víctimas con estos supuestos servicios de hackeo, les roban su propia información personal. La fase final es la extorsión y el robo de los propios clientes.

La Policía Nacional calcula que el delito supera los 300.000 euros

La maniobra de la Policía Nacional ha resultado en tres detenciones y dos imputaciones por delitos de estafa, extorsión, vulneración de la intimidad, blanqueo y pertenencia a grupo criminal. La unidad localizó 12.000 anuncios de publicidad fraudulenta, asociados a más de 200 cuentas de correo electrónico, 40 números de teléfono diferentes, 1.300 direcciones de IP de conexión a internet y más de 100 cuentas bancarias españolas y extranjeras. El equipo investigador calcula que la cantidad robada por esta banda dedicada a la ciberextorsión supera los 300.000 euros. El número de víctimas estafadas superaría el centenar.

La banda tenía su núcleo operativo en Córdoba, con direcciones asociadas en Badajoz y León. Tras un año de seguimiento de la información recopilada, los agentes accedieron a las residencias vigiladas. El material informático incautado: 5 terminales de telefonía móvil, 12 terminales de telefonía, 1 disco duro, 5 pendrives, 28 tarjetas SIM y archivos de datos con información bancaria de los clientes engañados.