Los ‘deepfakes’ se usan como arma de guerra en conflictos internacionales

Deepfakes
Redacción

Los deepfakes son manipulaciones realistas de videos e imágenes que se están empleando como arma de guerra con el objetivo de distorsionar la opinión pública en los conflictos. Para eliminar esta amenaza son necesarias tecnologías de detección avanzadas, la colaboración internacional y una mayor concienciación sobre los riesgos. Datos obtenidos por el Foro Económico Mundial han apuntando que los ataques de este tipo se disparan cada año un 900 por ciento.

Según el director general de Secure&IT, Francisco Valencia: «los deepfakes se han convertido en una herramienta muy peligrosa en el contexto de las guerras, donde la desinformación puede tener consecuencias catastróficas, debido a las reacciones que puede provocar».

En este sentido, la Oficina Federal de Investigación de Estados Unidos (FBI) ha advertido que los deepfakes no solo se usan en la guerra. También  se emplean con fines delictivos, sobre todo para realizar estafas y extorsiones. Por ejemplo, los ciberdelincuentes manipulan grabaciones que posteriormente difunden en webs pornográficas y foros para acabar exigiendo a las víctimas una cuantía económica por su eliminación.

Cinco consejos para detectar un ‘deepfake’

No es fácil defenderse de un deepfake, como tampoco lo es detectarlo, ya que las tecnologías detrás de ellos no dejan de sofisticarse. Según Secure&IT, algunos consejos para detectar esta amenaza son los siguientes:

  1. Observar el movimiento de los ojos. Con regularidad, los ojos presentan movimientos con falta de naturalidad, como un parpadeo irregular o directamente una ausencia de parpadeo.
  2. Analizar los labios y su sincronización con el audio. Es fundamental prestar atención al movimiento de los labios y detectar si coinciden con las palabras pronunciadas en el audio.
  3. Evaluar la forma de la piel. Los deepfakes pueden mostrar inconsistencias en los bordes del rostro, de los hombros o del cabello.
  4. Examinar la iluminación. Las diferencias en la iluminación y las sombras en el rostro pueden ser indicadores de que se trata de un deepfake.
  5. Verificar la fuente. Los deepfakes se encuentran normalmente en plataformas menos reguladas, por lo que es importante comprobar si el contenido procede de una fuente fiable.

¿Dónde se han empleado?

Por ejemplo, en el conflicto entre Rusia y Ucrania se pueden encontrar muchos ejemplos de deepfakes. En concreto, unos ciberdelincuentes rusos publicaron un video falso de Volodymyr Zelensky, presidente de Ucrania, dando órdenes de rendición a su ejército. Este caso se convirtió en el primer uso de desinformación con deepfake como arma en un conflicto militar.

De igual manera, entre Israel y Hamás ocurre algo parecido. En este caso es la inteligencia artificial la que se está utilizando como arma. Se generan rumores y noticias falsas que inundan las redes de forma masiva, a pesar de la amplia cobertura mediática que recibe el conflicto.

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